PROTECTORES SOLARES O FOTOPROTECTORES: CONSEJOS

DEFINICIÓN: Los protectores solares o fotoprotectores son una gama de productos que ofrecen protección contra las radiaciones UVB y UVA. Antes se pensaba que los efectos más dañinos se debían a los UVB, pero estudios científicos realizados desde hace ya 30 años, muestran que ambos tienen efectos peligrosos tanto a corto, como a medio y largo plazo.

 DEFENSA NATURAL DEL ORGANISMO

El organismo tiene una forma natural de defenderse del sol y es sintetizando melanina. La melanina es un pigmento que se forma en los melanocitos, que son unas células que se encuentran en la capa basal de la epidermis y cuando nos exponemos al sol va ascendiendo a las capas más superficiales para protegernos como una pantalla y nos da el color moreno o bronceado.

Hay alimentos ricos en betacarotenos o provitamina A, que nos ayudan en la síntesis de melanina y son antioxidantes que nos ayudan a luchar contra los radicales libres que se producen por la incidencia de los rayos ultravioleta en la piel. Estos alimentos son frutas y verduras coloreadas como: tomate, zanahoria, calabaza, fresas, mango, frutos rojos y también las espinacas. Pero es evidente que, aunque ayudan, no es suficiente, no basta para protegernos.

Cada individuo tiene una capacidad diferente para protegerse del sol, según su fototipo. Según la clasificación de Fitzpatrick tenemos los siguientes fototipos:

  • FOTOTIPO I Y II: Son pieles y ojos claros, que no se broncean y siempre se queman.
  • FOTOTIPO III: Piel algo más morena, pero también se queman.
  • FOTOTIPO IV: Propios de zonas mediterráneas, no se queman
  • FOTOTIPO V: Mulatos
  • FOTOTIPO VI: Las personas más protegidas de raza negra.

Cuanto más bajo es el fototipo, más elevada debe ser la protección.  

Esta aparece en los fotoprotectores con las siglas S.P.F (factor de protección solar)

CONSEJOS GENERALES

  1. La salud de la piel está siempre por encima del concepto estético del bronceado. El daño solar es acumulativo desde la niñez. La piel no olvida.
  2. Tanto en la ciudad, como en la playa, en el agua, en la montaña, tenemos que protegernos. Protección a diario.
  3. Ni siquiera las protecciones más eficaces garantizan una protección total frente a los riesgos que la radiación solar supone para nuestra salud. PRUDENCIA.
  4. Los fototipos más claros y los niños deben elegir un SPF 50. Las pieles más oscuras podrían elegir un SPF 30, pero NUNCA, aunque sean morenos, la protección debería de estar por debajo de 15
  5. Hay que darse una generosa cantidad de fotoprotector y no olvidarse de las zonas más sensibles: cuero cabelludo, cara, cuello, espalda, orejas, incluso el dorso del pie.
  6. Darse la crema 30 minutos antes de la exposición solar y repetir la aplicación cada dos horas, pues pierde eficacia con el roce de la arena, la ropa, la toalla, el pareo, el sudor y el agua.
  7. Un bronceador no es un fotoprotector. Solo es un cosmético que intensifica el bronceado, no nos protege.
  8. Entre una crema y un aceite, si ambos tienen el mismo SPF, deben proteger lo mismo. Elegir el aceite en pieles o zonas del cuerpo más secas, si se prefiere. Elegir las emulsiones o cremas más ligeras en pieles más grasas. Hay fotoprotectores libres de gasa, para pieles con acné
  9. Los fotoprotectores pueden llevar filtros físicos, químicos y una mezcla de ambos:
    1. FILTROS FÍSICOS:  También llamados pantallas solares, hacen un efecto de espejo y hacen que reboten las radiaciones solares. No se absorben, no tienen buena cosmética y dejan la piel blanquecina. Hoy existen filtros físicos micronizados con nanopartículas que tienen mejor cosmética. Ideales para pieles muy blancas y niños menores de tres años. Son: Óxido de zinc, Óxido de hierro, Dióxido de titanio, mica, caolín y talco.
    2. FILTROS QUÍMICOS: También llamados orgánicos, estos absorben las radiaciones solares y las transforman. Son cosméticamente mucho más agradables, los que hay en el mercado son seguros y muy textados, pero en pieles muy atópicas o muy sensibles y en niños muy pequeños podrían producir alguna alergia. Son: Mexoryl, cianatos, tinisorb, PABA, benzofenonas… Tardan 30 minutos en actuar.

Los más extendidos entre los protectores solares son los filtros químicos y gran cantidad de fotoprotectores llevan una mezcla de los dos. Todos son seguros y eficaces.

Protectores solares, fotoprotectores. Esquema

CUALIDADES DE UN BUEN FOTOPROTECTOR

  1. Capacidad de conservar sus propiedades
  2. Capacidad de fijarse a la piel y resistir el roce
  3. Resistencia al agua
  4. Tolerabilidad, ausencia de reacciones e hipoalergénicos
  5. Facilidad de aplicación
OTROS CONSEJOS MÉDICOS DE PROTECCIÓN FRENTE AL SOL Y EL CALOR
  1. Evitar el sol del mediodía
  2. Protegerse con camiseta de algodón y gorros o viseras.
  3. Beber líquidos en abundancia.
  4. Utilizar gafas de sol homologadas
  5. Tras la exposición solar utilizar una buena hidratación con un after-sun.
  6. Estar atentos por si estamos utilizando alguna medicación que aumente nuestra fotosensibilIdad. Si tiene dudas, preguntarlo a su médico
  7. Visitar al dermatólogo para la detección precoz del cáncer de piel.

Espero que todos estos consejos os ayuden a la hora de elegir un buen protector solar o fotoprotector y disfrutar saludablemente del verano. Si querés más información para cuidar vuestra piel tras el verano podéis leer el siguiente post: Consejos prácticos tras la exposición solar del verano. También os servirá la lectura de nuestro post:  El envejecimiento de la piel