El ENVEJECIMIENTO DE LA PIEL

El envejecimiento de la piel es un proceso fisiológico que se acentúa con el paso del tiempo, pero puede evidenciarse, desde los 20-30 años.

La causa última del envejecimiento, es la oxidación celular, debido a la acción de los radicales libres que van formándose por las múltiples agresiones que sufrimos en el día a día: la polución, el tabaco, el sedentarismo, las radiaciones solares, las dietas inadecuadas y un largo etc. Lo mejor es PREVENIR con estilos de vida más saludables, que potencien a nuestros propios sistemas antioxidantes de defensa. Si la oxidación sobrepasa al sistema antioxidante que poseemos, tendrá lugar un envejecimiento de nuestra piel más acelerado.

Con el tiempo va disminuyendo la síntesis de colágeno y elastina y la piel va perdiendo brillo, densidad, hidratación y firmeza. Aparecen las primeras arrugas, que se van haciendo con el paso del tiempo más evidentes.

Si nos fijamos en nuestro rostro, pueden evidenciarse dos tipos de arrugas:

  1. De expresión, que se van formando por la contracción repetida de los músculos de la mímica. Estas son evidentes sobre todo en el tercio superior de la cara: entrecejo, patas de gallo…
  2. Por caída o flaccidez, se observan en el tercio inferior de la cara: surco naso-geniano, arrugas comisurales a ambos lados de las comisuras labiales, la pérdida de óvalo facial…

Envejecimiento de la piel. Dibujo

No podemos detener el paso del tiempo, pero podemos paliar o mitigar sus efectos con unos estilos de vida y cuidados sencillos. Por ej:

  1. Evitar la exposición solar prolongada y sin protección
  2. Realizar ejercicio físico y mejor al aire libre.
  3. Una buena alimentación; no se puede mejorar la piel solo por fuera con cremas, hay que mejorarla también por dentro.
  4. Evitar el consumo de tabaco y alcohol

CÓMO MEJORAR LA PIEL POR DENTRO

  • Beber como mínimo 1,5 litros de agua, mejor poco a poco y entre horas. En invierno si se hace menos apetecible, podemos intentarlo con infusiones, por ejemplo, el té verde, que además es antioxidante.
  • Alimentos ricos en Vitamina A, que es la vitamina protectora de piel y mucosas: Las zanahorias, fresas, tomates.
  • Alimentos ricos en Vitamina C (antioxidante): Naranjas, limones, Kiwi, frutos rojos…
  • Alimentos ricos en Vitamina E (antioxidante): aceite de oliva, cereales integrales…
  • Alimentos ricos en Selenio (antioxidante): Verduras, frutos secos, el salvado, la levadura de cerveza…

Alimentos con vitamina A para prevenir el envejecimiento de la piel

CUIDADOS DOMICILIARIOS BÁSICOS

Tanto la piel del rostro como el cuerpo necesitan:

– Limpieza e higiene diaria, nunca el agua muy caliente porque aumenta la flaccidez, jabones o geles neutros, leche limpiadora, geles que no aportan grasa, agua micelar…

– Una vez por semana una exfoliación suave para retirar las células muertas de la epidermis.

– Una buena crema hidratante, nutritiva y reafirmante en el caso de cuerpo y en la cara, cuidados más específicos.

CUIDADOS FACIALES MÁS ESPECÍFICOS

-Además de la limpieza con un producto adaptado para cada tipo de piel, es básico una buena hidratación a todas las edades.

-Desde la etapa media de la vida, podemos comenzar con otros tratamientos anti-Aging, ricos en antioxidantes como la vitamina C, E, iluminadores, despigmentantes, reparadores, nutritivas, en forma de cremas y/o serums, hay múltiples principios activos y varias formas galénicas que se adaptan a la piel de cada individuo. Hoy en día se investiga mucho en el campo del rejuvenecimiento facial y se nos ofrecen muchos productos, la clave es dejarse aconsejar bien. No siempre lo más caro es lo mejor, ni en todas las pieles la respuesta es similar con un mismo producto. Tampoco todas las pieles, tienen las mismas necesidades. EL CONSEJO DE UN BUEN PROFESIONAL LE AYUDARÁ

TRATAMIENTOS MÉDICOS ESTÉTICOS

Todos ellos tienen como objetivo aumentar la satisfacción del paciente. Hay muchos tratamientos y cada semana nos bombardean las revistas con alguno nuevo: Peelings, láser, radiofrecuencia, mesoterapia facial con ácido hialurónico y antioxidantes, toxina botulínica y distintos tipos de rellenos. Todos ellos tienen objetivos comunes: dar más brillo, redensificar, unificar el color, tensar, recuperar volúmenes perdidos, es decir mejorar el aspecto de nuestra piel y mostrar una piel más joven y saludable.

No podemos luchar contra el paso del tiempo, pero podemos sentirnos mejor y envejecer de manera digna y saludable.